Palmeira berra: Médico Xá!

Palmeira fue un clamor para exigir atención médica a tiempo completo

Texto extraído do artigo por Marta Gómez de La Voz de Galicia. 21 Agosto 2022.

 

Los vecinos mostraron su indignación con una protesta que cortó la AC-305

«Non, non, non, á privatización» o «non, non, non, Palmeira non se pecha» son algunas de las consignas que corearon los asistentes a la concurrida manifestación con la que los vecinos de la localidad ribeirense mostraron su indignación por que no se está cubriendo la baja de su médico. La localidad fue un clamor para exigir asistencia presencial y a tiempo completo, algo que, denuncian, no tienen garantizado.

Los portavoces que tomaron la palabra al finalizar la protesta aseguraron que, hasta el 31 de agosto, habrá tres días de atención presencial, siempre que no haya imprevistos que lo impidan, y ante la falta de una respuesta adecuada por parte de las Administraciones al problema dijeron sentirse «abandonados e enganados con tanta mentira e manipulación». Un sentimiento que, a juzgar por la participación en la manifestación de este domingo, es generalizado.
 
Al filo del mediodía, decenas de personas caminaban por la AC-305 a su paso por Palmeira. Parecía una especie de peregrinación, aunque su destino no era Santiago, sino el lugar de A Lagüiña, desde donde partió la manifestación al grito de «alcalde, escoita, Palmeira está en loita».
 
 

Sin policía

A la indignación reinante por las carencias en cuanto a asistencia sanitaria en la parroquia desde que el médico está de baja, se sumó la provocada por la ausencia de agentes de la Policía Local o de Tráfico que regulasen la circulación: «La manifestación está autorizada y aquí no hay nadie».

El recorrido finalizó a las puertas del centro de salud, donde un gran aplauso cerró un acto de protesta en el que quedó clara una cosa: «Imos continuar a loita, Palmeira non se pecha».

«Es una vergüenza que estemos sin médico, esto lo va a notar el PP en las elecciones»

Por las características de la manifestación, con un recorrido de más de un kilómetro a pleno sol, muchas personas, sobre todo mayores, no pudieron asistir a la protesta. Pero eso no evitó que la apoyasen, no solo con los carteles que lucen buena parte de las viviendas de Palmeira exigiendo un médico, sino porque muchos salieron a la puerta de sus casas al paso de las pancartas.

Una de esas mujeres de edad avanzada, apoyada en su bastón y con el brazo en alto mientras gritaba «non, non, non, Palmeira non se pecha», se mostraba especialmente indignada. «Es una vergüenza que estemos sin médico, esto lo va a notar el PP en las elecciones, aquí no van a salir más». La mujer estaba realmente enfada con una situación que perjudica especialmente a personas como ella: «En un pueblo tan grande como y con tanta gente mayor no hay derecho que cierren y tengamos que ir al médico a Ribeira o A Pobra».